Los niños pueden disfrutar del Teleférico de Montjuïc en familia, maravillándose con las vistas panorámicas de Barcelona y experimentando la emoción de estar suspendidos en el aire. En la cima, pueden explorar el Castillo de Montjüic y disfrutar de las vistas de los monumentos más emblemáticos de la ciudad. Es una forma divertida de enseñarles sobre la historia y la arquitectura de Barcelona.